Nuevo acuerdo: Estados Unidos reducirá los precios de ciertos medicamentos

El tema de la salud en Estados Unidos es uno de los que más polémicas y debates ha traído en los últimos años, recordando la cantidad de dinero que ha tenido que invertir el Gobierno para solventar esta difícil situación. A pesar de ser un país desarrollado, la nación norteamericana no ha podido establecer precios fijos para los medicamentos esenciales para las personas, situación que ha hecho que se pierdan muchos millones de dólares.

Como consecuencia de esto, el presidente Joe Biden, acompañado de la vicepresidenta Kamala Harris, hicieron oficial el acuerdo histórico con las farmacéuticas en el país, en el que una gran cantidad de personas se llegarán a ver beneficiadas con estos cambios. De la misma manera, el Gobierno de los Estados Unidos tendrá la posibilidad de ahorrar una cantidad importante de dinero en los próximos años.

En dicho acuerdo, Joe Biden aseguró que las farmacéuticas bajarán los precios de 10 medicamentos fundamentales para los ciudadanos norteamericanos. Asimismo, con este cambio marcado entre ambas partes, se tiene el potencial de generar ahorros significativos tanto para los beneficiarios del seguro Medicare como para los contribuyentes estadounidenses, siendo esta una excelente noticia para la salud de los norteamericanos.

Dentro de este listado de diez medicamentos, se encuentran los medicamentos Farxiga, utilizado en el tratamiento de la diabetes, producido por el grupo sueco-británico AstraZeneca. Entresto, medicamento de Novartis, dirigido a tratar problemas cardíacos y Eliquis, siendo este un anticoagulante fabricado por Bristol-Myers Squibb (BMS), ampliamente recetado para prevenir coágulos sanguíneos en pacientes con fibrilación auricular.

Al tener este nuevo acuerdo con las farmacéuticas, se tiene la intención de que Estados Unidos siga consiguiendo esta clase de medidas en los próximos años, con la idea de que los ciudadanos puedan ahorrar una cantidad de dinero considerable en sus tratamientos para su bienestar. Por su parte, el Gobierno estadounidense podrá ahorrar muchos millones de dólares generando un precio fijo para estos medicamentos relevantes para la vida de sus ciudadanos.