Por: Juan Carlos Garcia Sierra • Colombia.com

Un colombiano fue uno de los grandes ´parceros´ del Papa Francisco hasta el día de su fallecimiento

El colombiano Humberto Franco, Monseñor en Roma, fue uno de los amigos más cercanos del Papa Francisco hasta su fallecimiento.
 

Jorge Bergoglio será siempre querido gracias a su carisma y sencillez. Foto: Pixabay
Jorge Bergoglio será siempre querido gracias a su carisma y sencillez. Foto: Pixabay

El colombiano Humberto Franco, Monseñor en Roma, fue uno de los amigos más cercanos del Papa Francisco hasta su fallecimiento.
 

En momentos en los que el cónclave es uno de los acontecimientos que más ocupa la atención del mundo entero porque se decidirá quién será el nuevo representante de San Pedro en el mundo, en reemplazo del Papa Francisco, se conocen diferentes anécdotas y experiencias del sacerdote argentino que le dio un vuelco total al protocolo, debido a su enorme sencillez y don de gentes. 

Jorge Bergoglio marcó una época y Su carisma será difícil de olvidar, por eso el Papa que lo reemplace tendrá la difícil misión de dirigir la Iglesia Católica en el mundo y de contagiar de ánimo a los feligreses que, en Francisco, tenían a un hombre muy carismático.

El Papa Francisco estuvo ligado a Colombia porque estaba muy interesado el apoyo a la paz concertada y por ello escogió a nuestro país como uno de sus destinos de visita oficial en su papado en Latinoamérica, pero un colombiano ha salido a relucir debido a que fue uno de los hombres más cercanos y con quién entabló una relación de amistad.

Humberto Franco, ahora monseñor, trabaja en el Vaticano dirigiendo la Comisión para América Latina, y una vez Francisco fue electo papa, se inició casi que de inmediato una gran amistad. De acuerdo con una entrevista en semana, Humberto Franco conoció a Jorge Bergoglio en 2007 cuando este era cardenal y se hospedaba en el Domus Internacional Pablo VI, el mismo lugar donde hoy vive el sacerdote colombiano, y a partir de entonces se fortaleció una gran amistad que se extendió a toda su familia.

La relación entre el Papa Francisco y el sacerdote colombiano Humberto Franco fue tan estrecha que cuando la madre de este último falleció, el Papa concelebró con él una misa en honor a la mujer fallecida, con quien sostuvo amistad durante varios años. 

Franco destaca las calidades humanas del papa y su sencillez, y, también, recalcó su memoria prodigiosa, ya que memorizaba los números telefónicos y los nombres de las personas, así como sus fechas de nacimiento y enviaba mensajes o realizaba llamadas cuando alguien estaba de cumpleaños o en fechas muy especiales.

Monseñor Humberto Franco lamenta la pérdida del Papa Francisco y continuará trabajando en el Vaticano para realizar todos los esfuerzos posibles para que la Iglesia Católica en América Latina se mantenga fuerte, sólida y cada vez con mayor atención a las necesidades de los más pobres, algo en lo que siempre se mantuvo trabajando el sacerdote argentino.

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