ICE transformará cárcel abandonada en Mason, Tennessee, en su nuevo centro de detención para inmigrantes

A través de una empresa privada, un antiguo centro carcelario ubicado en Mason, Tennessee, será remodelado para funcionar como un centro de detención de inmigrantes bajo la administración del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).

Mason es un pequeño pueblo del estado de Tennessee. Su alcalde, Addie Noeman, junto a cinco miembros de la junta de concejales, aprobaron un plan para transformar el Centro de Detención del Oeste de Tennessee en una instalación destinada a albergar a personas detenidas por ICE. La decisión ha generado controversia entre los residentes, quienes expresan su desacuerdo con las políticas migratorias implementadas por el expresidente Donald Trump.

El centro penitenciario remodelado sería operado por la empresa CoreCivic Inc., en colaboración con ICE, que aplica de manera estricta la política antiinmigratoria de Trump, considerada por expertos como una de las más severas de las últimas décadas. En la reunión convocada por el alcalde Noeman, asistieron habitantes y residentes de la zona que manifestaron su rechazo a la presencia física de ICE en el pueblo.

Según Noeman, la reapertura de la cárcel que se encuentra cerrada desde hace varios años impulsará la economía local y generará nuevos puestos de empleo para los habitantes. “No se trata de nada personal contra ningún inmigrante. Darle trabajo a la gente es lo que busco”, declaró la alcaldesa, de origen egipcio.

Cabe señalar que la empresa privada encargada del proyecto ha enfrentado en el pasado 12 demandas en Tennessee bajo otra razón social. La compañía asegura que se crearán cerca de 240 empleos y que los oficiales voluntarios recibirán un pago de 26,50 dólares por hora.

Según datos oficiales, Mason tiene alrededor de 1.300 habitantes y se encuentra a 60 kilómetros de Memphis. En el pasado, la prisión fue una de las principales fuentes de empleo y un motor económico para la comunidad.

Una ciudadana que estaba presente en la junta, Virginia Rivers, señaló que está en contra de la medida de destinar el centro de detención al uso del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), ya que no le agrada lo que representa la agencia migratoria ni la forma en que se trata a los inmigrantes indocumentados en esos lugares.

“Nosotros, como funcionarios de la ciudad de Mason elegidos por los ciudadanos, deberíamos considerar las consecuencias y el daño que esto causaría a nuestra comunidad local, a nuestros vecinos, a las escuelas de Tennessee y a muchas familias”, expresó Rivers.