Bogotá

Por: Redacción Turismo • Colombia.com

Maloka

Aunque los tradicionalistas no lo crean, no existe nada más divertido que gozar con la ciencia y la tecnología, la ciudad de Bogotá cuenta desde hace 20 años con un lugar único para ello y que tiene abiertas las puertas para que niños, jóvenes y adultos de todas las edades hagan de su visita una experiencia memorablemente divertida.

Actualización
Maloka Centro Interactivo de Ciencia y Tecnología es un museo de tercera generación. Foto: Shutterstock
Maloka Centro Interactivo de Ciencia y Tecnología es un museo de tercera generación. Foto: Shutterstock

Aunque los tradicionalistas no lo crean, no existe nada más divertido que gozar con la ciencia y la tecnología, la ciudad de Bogotá cuenta desde hace 20 años con un lugar único para ello y que tiene abiertas las puertas para que niños, jóvenes y adultos de todas las edades hagan de su visita una experiencia memorablemente divertida.

CIENCIA CON DIVERSIÓN

Muchas tribus llamaban Maloca a los centros de pensamiento de los chamanes y es por eso que este nombre le resulta muy adecuado porque este es un centro educativo, científico, cultural, tecnológico, recreativo y turístico.

Maloka tiene como propósito fundamental la construcción de una sociedad basada en el conocimiento y el aprendizaje, por ello las actividades que se realizan alrededor de la ciencia y la tecnología son totalmente interactivas porque la experimentación es tomada como la base del aprendizaje produciendo efectos sensoriales divertidos que garantizan el pleno disfrute e incentivan el deseo por conocer el mundo y sus leyes dominantes.

Alejados de toda la instrucción tradicional de enormes teorías y letras, este recinto pone en conocimiento de todos la mejor forma de aprender, esa que genera diversión pero especialmente motivación por el descubrimiento y la observación.

Una visita a Maloka es una experiencia interactiva en donde se descubre cómo la ciencia y la tecnología se encuentran en todos los aspectos que determinan nuestra vida cotidiana como los relacionados con la física, la astronomía y la química en el inquietante mundo del tiempo, la materia y el espacio.

En esta superficie científica también es posible realizar un recorrido para la contemplación de las plantas nativas y reflexionar sobre el cuidado de los bosques de niebla y andinos, característicos de Bogotá y su sabana, aspectos que forman educación ambiental sostenible en pequeños ciudadanos y en grandes también.

Maloka es recorrido por estudiantes de todas las edades de forma individual y colectiva; son los colegios e instituciones educativas quienes aportan el mayor número de visitantes pero el público mayor se convierte en un segmento que crece cada día más.

Otro aspecto de interés general tiene que ver con el rastreo de la vida y su evolución ya que a través de microscopios electrónicos, caminadoras y contenido audiovisual se genera un concepto que le da valor a la existencia y a los recursos naturales como el agua.

El pensamiento es la base de este lugar y resalta la importancia de la mente como motor del sistema de control del cuerpo, aquí los juegos e ilusiones ópticas refuerzan cada noción fomentando enseñanza amena y efectiva.

Maloka es emoción y se estimula permanentemente aprovechando todo tipo de recursos tecnológicos que producen ese deseo de querer volver, aquí se goza como niño sin importar la edad y se comprueba que la mente de los seres humanos tiene cuerda para rato, es la esencia de la ciencia y todos sin importar nuestra preparación académica tenemos un mundo por descubrir.

Entrar a Maloka es abrirle las puertas al conocimiento y a los avances del mismo, es un tipo de turismo diferente y que seguramente le hará disfrutar hasta el cansancio de la ciencia, porque jamás existió mejor forma de aprender. Usted viene de turismo y hace algo que quizás no tenía en sus planes: llenarse de conocimiento y ganas de aprender y experimentar.

¡Porque nunca la ciencia fue tan divertida!