Esmalte semipermanente: ¿cuáles son los riesgos a los que te expones?
La aplicación excesiva del esmalte semipermanente sí tiene efectos negativos en tu cuerpo; te contamos cuáles son los riesgos que corres con este producto.
La aplicación excesiva del esmalte semipermanente sí tiene efectos negativos en tu cuerpo; te contamos cuáles son los riesgos que corres con este producto.
La manicura semipermanente se ha convertido en la perfecta aliada de muchas personas, teniendo en cuenta su duración, que oscila entre 2 y 3 semanas, pero que en algunas personas puede alcanzar incluso el mes, así como la variedad de estilos que se le pueden dar a las uñas. Para ello, se hace uso de productos especiales como esmaltes semipermanentes y una lámpara con luz ultravioleta o led.
Y aunque algunos profesionales en el campo estético insisten en que se trata de productos inofensivos que no atentan contra la salud de la uña, si el proceso lo realiza una persona capacitada de la forma correcta, expertos en el ámbito de la salud opinan lo contrario y dan a conocer los numerosos efectos negativos de esta técnica, tanto para la piel como para las uñas.
Y es que, tal como lo da a conocer el portal de OCU, organización de consumidores de España, “estos esmaltes tienen una composición que incluye sustancias tóxicas o compuestos que pueden afectar a la uña”, entre los que se destacan los acrilatos (con elevada capacidad de producir reacciones alérgicas en la piel), la hidroquinona (restringida por su toxicidad), o la hidroquinona metiléter.
Precisamente, estas son las razones por las que algunos profesionales recomiendan no abusar con la aplicación de estos esmaltes, dándole descansos a las uñas y evitando usarlos con tanta frecuencia, mientras algunos otros aconsejan no utilizarlos nunca; para que puedas comprender un poco mejor dicha perspectiva, te compartimos algunos de los riesgos a los que podrías exponerte, según el portal experto ‘Tu canal de salud’:
- Empeora el aspecto de la uña natural: las uñas pueden volverse amarillas, con fisuras o manchas blancas, granulomas de queratina.
- Separación de la uña con la carne: por mala colocación de las uñas postizas, se puede generar un desprendimiento de la uña natural u onicolisis.
- Alergias o dermatitis: al entrar en contacto con algunos componentes de dichos productos, como parabenos, alcanfor, formaldehido, colofonia o niquel, se pueden producir reacciones alérgicas en la piel y las uñas.
- Escamas en otras partes del cuerpo: cuando el esmalte entra en contacto con otras partes del cuerpo, se pueden sufrir afecciones cutáneas que se manifiestan con picazón en párpados, cuello, entre otras zonas. La solución podría ser usar productos hipoalergénicos.
- Daños en las cutículas: cuando hacen este tipo de manicura y recortan la cutícula, se pueden sufrir inflamaciones e infecciones alrededor de la uña
- Infecciones: por el uso de estos productos, puedes padecer infecciones por hongos o bacterias.
- Debilidad y falta de brillo: estos procesos también hacen que las uñas se vuelvan más débiles y pierdan el brillo natural.
- Enfermedades: los esmaltes no producen en sí las enfermedades, pero al durar demasiado tiempo en la uña hacen que no puedas estar alerta a signos que suelen aparecer en esta zona cuando algo no anda bien con tu cuerpo.