Estrés y ansiedad: síntomas físicos que alertan cuando tu cuerpo pide ayuda, pueden confundirse con otras enfermedades

La ansiedad es una emoción normal que el ser humano experimenta en situaciones en las que se siente amenazado por un peligro externo o interno; sin embargo, según profesionales de la Clínica Universidad de Navarra, cuando es desproporcionada y prolongada se convierte en un problema de salud mental. 

De acuerdo con especialistas de Medline Plus, cuando el sentimiento y los síntomas no desaparecen y empeoran con el tiempo se desarrolla un problema conocido como trastorno de ansiedad, que puede ser de diversos tipos: 

1. Trastorno de ansiedad generalizada: en el cual las personas se preocupan por problemas comunes como la salud, el dinero, el trabajo y la familia.
2. Trastorno de pánico: en el cual se experimentan ataques de pánico repentinos en momentos en los que no existe un peligro aparente.
3. Fobias: en las que existe un miedo intenso a algo que representa poco o ningún peligro real. 

Síntomas

Aunque cada paciente puede experimentar diferentes síntomas dependiendo del tipo y el grado del trastorno de ansiedad, la mayoría siente: 

• Palpitaciones
• Sensación de ahogo
• Angustia
• Inestabilidad
• Temblores
• Miedo a morirse

Cuando la ansiedad se disfraza de enfermedad 

Expertos en salud mental destacan que los síntomas de la ansiedad pueden confundirse con los de otras enfermedades. A esto se le conoce como somatización o “ansiedad somática”.

Los pacientes que sufren este tipo de ansiedad convierten su estrés o preocupación mental en molestias corporales como: dolores, malestares digestivos, tensión muscular, entre otros. Si bien los síntomas son reales, no son el resultado de una enfermedad, sino de la acumulación de estrés en el cuerpo. 

La razón por la cual aparecen estas dolencias es la activación del sistema de respuesta al peligro que presenta el cuerpo cuando se siente amenazado por la ansiedad, que implica la liberación de hormonas como el cortisol y la adrenalina, que afectan múltiples sistemas del cuerpo: cardiovascular, digestivo, muscular, respiratorio.  

Síntomas que se pueden disfrazar de enfermedades 

Algunas de las expresiones del cuerpo ante el estrés o la ansiedad que se tornan físicas son: 

• Palpitaciones, latido cardíaco acelerado o irregular.
• Tensión o dolor muscular en el cuello, la mandíbula o la espalda.
• Rigidez o molestias crónicas musculoesqueléticas.
• Dolores de cabeza frecuentes o cefaleas tensionales.
• Problemas digestivos: diarrea, estreñimiento, malestar estomacal, náuseas, gases.
• Dificultad para respirar, sensación de falta de aire, hiperventilación.
• Problemas del sueño: insomnio, sueño interrumpido, fatiga crónica, cansancio intenso.
• Alteraciones del sistema inmunológico: caída de defensas, mayor susceptibilidad a infecciones, empeoramiento de alergias o enfermedades crónicas.
• Malestar general, sensación de debilidad o fatiga persistente sin causa clara.