Salvatore Mancuso en modo navideño: juega al sí y al no con acusaciones al expresidente Álvaro Uribe

Salvatore Mancuso, hoy gestor de paz, ya no está seguro de tener pruebas contra Álvaro Uribe en el caso de la muerte de Eudaldo Díaz en 2003.

Por: Juan Carlos Garcia Sierra • Colombia.com
Álvaro Uribe en épocas de su mandato presidencial entre 2002 y 2010. Foto: Shutterstock
Álvaro Uribe en épocas de su mandato presidencial entre 2002 y 2010. Foto: Shutterstock

Salvatore Mancuso, hoy gestor de paz, ya no está seguro de tener pruebas contra Álvaro Uribe en el caso de la muerte de Eudaldo Díaz en 2003.

El 1 de febrero de 2003, siendo Álvaro Uribe presidente de la República y durante un consejo realizado en Corozal, Sucre, Eudaldo Díaz Salgado, alcalde del municipio de El Roble, en el mismo departamento, denunció a la clase política dirigente de la zona por presuntos vínculos con grupos paramilitares.

´Ma van a matar´

Eudaldo Díaz le dijo al presidente Uribe que su vida corría riesgo y poco tiempo después el alcalde fue asesinado, presuntamente por los paramilitares. Sobre la autoría del crimen, el temido exparamilitar Salvatore Mancuso indicó que el expresidente Álvaro Uribe Vélez había tenido que ver, sin embargo, hoy, quien funge como gestor de paz gracias al nombramiento realizado por el presidente Gustavo Petro ya no se muestra tan seguro de ello.

Salvatore Mancuso, de acuerdo con la revista Semana, planteó a la Fiscalía General de la Nación una propuesta de conciliación con Álvaro Uribe Vélez en la cual le ofrece disculpas por haberlo acusado ante la Jurisdicción Especial para la Paz de ser responsable de la muerte de Eudaldo Díaz.

Cuando Mancuso formuló acusaciones contra el expresidente Álvaro Uribe, este presentó una querella por injuria y calumnia, pero ahora Mancuso dice estar dispuesto a conciliar por las acusaciones hechas contra Uribe asegurando que no le constan y que no tiene evidencia sobre una presunta participación del expresidente en el asesinato de Eudaldo Díaz.

´Denuncié a Arana´: Díaz

Eudaldo Díaz manifestó antes de morir en el consejo popular realizado en Corozal, Sucre el 1 de febrero de 2003 frente al presidente Álvaro Uribe, que había denunciado al gobernador de Sucre, Salvador Arana, por presuntos vínculos con la parapolítica y que esto le costaría la vida. 

Salvador Arana fue señalado por Gustavo Petro, por aquel entonces parlamentario, como cerebro de la muerte de Eudaldo Díaz, por tal razón el exgobernador y embajador en Chile se dio a la fuga y fue condenado por la Corte Suprema de Justicia por el homicidio del alcalde Díaz.

Luego de la muerte del exalcalde de El Roble, Eudaldo Díaz, se aseguró que una orden para quitarle su esquema de seguridad facilitó la acción de sus asesinos y allí es donde Salvatore Mancuso tiene que ver, pues aseguró que esto se debió a órdenes directas del presidente Álvaro Uribe Vélez, que, presuntamente, tenía intereses en acabar con la vida de Díaz. 

Gestor de paz gracias a Gustavo Petro

Salvatore Mancuso Gómez, temido exparamilitar y uno de los protagonistas más sanguinarios de la violenta historia de Colombia en los últimos 30 años, purgó una pena por narcotráfico en Estados Unidos y a su regreso al país fue nombrado gestor de paz por el presidente Gustavo Petro dentro de su política de paz total. 

Mancuso, quien cuenta con nacionalidad italiana porque su padre es oriundo de Nápoles, ha confesado diversos crímenes y ha vinculado a diferentes personajes de la vida política nacional. 

Mancuso, nacido en el departamento de Córdoba, fue líder de las AUC, Autodefensas Unidas de Colombia, que sembraron el terror en la costa Norte colombiana en los años 90 y principios del siglo XXI y su retractación es analizada por el ambiente político nacional con sigilo, pues existen quienes creen que son argucias del exparamilitar y también están los que consideran que son pruebas auténticas de su compromiso con la verdad y la paz.