Texas o California. En cuál de estos estados los ilegales cruzan con menores inconvenientes
En Texas o en California los ilegales cruzan con menores inconvenientes. Uno de estos estados realiza controles exhaustivos contra la inmigración, mientras que en el otro no son tan estrictos.

En Texas o en California los ilegales cruzan con menores inconvenientes. Uno de estos estados realiza controles exhaustivos contra la inmigración, mientras que en el otro no son tan estrictos.
La frontera entre México y los Estados Unidos, para este último país, ´frontera Sur´, es un límite de impresionante extensión territorial que tradicionalmente ha servido de ingreso para inmigrantes indocumentados a los Estados Unidos.
Con motivo de la crisis migratoria, los controles y las normas se han endurecido con la intención de desanimar a todas aquellas personas que quieren llegar a los Estados Unidos en condición de indocumentados, y para ello, se ha reforzado la vigilancia en los puntos y se han endurecido las penas.
Los estados fronterizos de los Estados Unidos con México son Texas, Arizona, Nuevo México y California, territorios que alguna vez pertenecieron a México, pero que fueron ganados a través de disputas bélicas en la primera mitad del siglo XIX.
Las personas que se atreven a llegar hasta la frontera Sur con el ánimo de Ingresar a los Estados Unidos de manera ilegal se preguntan en qué punto los agentes migratorios no son tan estrictos, es decir, aquellos lugares en los que los encargados de hacer cumplir la ley pueden ser más flexibles y permitir el ingreso para que los indocumentados pueden acceder al trámite de una solicitud de asilo e incluso puedan ser recibidos en centros especializados de detención.
El inmigrante ilegal tiene que elegir entre California, Nuevo México, Arizona o Texas para ingresar a los Estados Unidos, sin embargo, California y Texas son los puntos con mayor número de inmigrantes ingresando en su territorio, por eso la pregunta que cobra importancia es en cuál de estos estados los agentes de inmigración son más estrictos.
Texas es actualmente un estado muy estricto frente al ingreso de indocumentados debido a que tradicionalmente ha servido como la puerta de entrada de millones de mexicanos a los Estados Unidos, teniendo el estado un componente poblacional de origen mexicano cercano al 60%.
Las leyes que rigen Texas son duras contra la inmigración son muy duras, en especial porque el gobierno del Estado es presidido por Greg Abbott, un miembro del partido republicano, el mismo de Donald Trump y quien están en contra de que la migración ilegal continúe presentándose en el país.
La otra cara de la moneda está representada en el estado de California, que cuenta con un gobierno demócrata, el de Gavin Newsom, la misma agrupación política del presidente Joe Biden y la aspirante presidencial Kamala Harris.
Tradicionalmente, los demócratas han sido más flexibles con la inmigración y le han puesto un toque más humano considerando que los Estados Unidos, desde su conformación, son un estado que abre la puerta a los llegados de diferentes lugares del mundo buscando un mejor futuro y libertad ante la opresión.
California suele ser un estado más laxo frente a la inmigración ilegal, de hecho, en el estado funcionan todavía algunas de las llamadas ciudades santuario, aquellas poblaciones o localidades que acogen inmigrantes sin aplicar estrictamente la ley federal contra la inmigración.
Actualmente, y, ante el endurecimiento de las políticas migratorias determinadas por el presidente Joe Biden, se presentan detenciones sin importar que tan flexible sea un estado ante el asunto de la inmigración, esto se debe al cierre de fronteras decretado por el mandatario el 1 de junio, y, que ordena que cuando exista un número mayor a 2.500 inmigrantes cruzando la frontera, esta se cerrará y permanecerá así hasta que el número de personas intentando ingresar se aproxime a los 1300, de lo contrario, quien intente ingresar será detenido y deportado.