Inmigrantes indocumentados detenidos protestan ante el mundo de una manera muy particular

La inmigración ilegal tiene diversas caras, la mayoría dolorosas, mientras que la ofensiva de Donald Trump contra todo aquel que no tenga estatus legal en los Estados Unidos es implacable, millones de indocumentados, los cuales han trabajado durante muchos años en el país y cuentan con familia, parte de ella nacida en territorio norteamericano se han visto perseguidos, y algunos detenidos aseguran que las condiciones en las que se encuentran recluidos no son óptimas.

Bajo el amparo de la Ley de Extranjeros Enemigos, Donald Trump y su administración pretenden erradicar la presencia de delincuentes extranjeros pertenecientes a grupos trasnacionales del crimen como el Tren de Aragua y la MS 13 Mara Salvatrucha de El Salvador.

Defensores de inmigrantes señalan que la ofensiva de Donald Trump contra los supuestos delincuentes ha mostrado fallas al haber capturado en su mayoría a personas de bien, trabajadoras y con peticiones de asilo, y que fueron arrestados dentro de dependencias pertenecientes a servicios de inmigración cuando atendían llamados de carácter migratorio.

El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos DHS ha advertido que los centros de detención propios del Servicio de Migración y Control de Aduanas ICE de los Estados Unidos, no cuentan con la capacidad para albergar detenidos, y menos, cuando el plan de Donald Trump es deportar millones de ellos.

Ante el hacinamiento de inmigrantes en el centro de detención del ICE de Bluebonnet en Anson, Texas, una treintena de detenidos de nacionalidad venezolana, decidieron formar la palabra SOS, que significa auxilio esto como una forma de comunicar al mundo que se encontraban en riesgo de deportación al ser considerados por el gobierno de Donald Trump como personas con vínculos con el Tren de Aragua o las maras salvadoreñas y temen ser deportados al CECOT en El Salvador.

No es la primera vez que los inmigrantes ilegales se quejan, centenares de ellos llevados hasta la prisión de Guantánamo en Cuba, manifestaron haber sido víctimas de muy malos tratos de parte de los guardias de las Fuerzas Armadas que los custodiaban, así como de agentes de inmigración del ICE, quienes, según los denunciantes, usaban todo el tiempo palabras con contenido xenófobo, mientras que debían soportar condiciones insalubres y comida en mal estado.

Algunos analistas consideran que la ofensiva contra la inmigración ilegal de Donald Trump generará mayores molestias entre los detenidos porque elevará el número de quejas por hacinamiento, sin embargo, existe un plan en los Estados Unidos que entregará la construcción y operación de centros de detención de migrantes ilegales a empresas privadas de seguridad, y todo esto podrá ser potenciado con la entrega de un multimillonario presupuesto que el Senado aprobó para que se continúe con el plan de deportaciones masivas y el fortalecimiento de la operación del ICE.