Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Mario Vallés, el vallecaucano que ofrece gustoso el mejor sabor de Colombia en España

Mario Vallés es un vallecaucano que con sus tres restaurantes en Madrid ofrece lo mejor de sus platos al exigente público madrileño convirtiéndose en un gustoso embajador colombiano.

Mario Vallés , antes judoca, dio su mejor golpe con la culinaria en Colombia y España. Foto: Youtube
Mario Vallés , antes judoca, dio su mejor golpe con la culinaria en Colombia y España. Foto: Youtube

Mario Vallés es un vallecaucano que con sus tres restaurantes en Madrid ofrece lo mejor de sus platos al exigente público madrileño convirtiéndose en un gustoso embajador colombiano.

Pasar del judo a la cocina fue un cambio total para un hombre nacido en el Valle del Cauca, pero su deseo de hacer siempre lo que más le gusta, y de paso, ser un buen embajador colombiano, motivaron a Mario Vallés ha salir del país para mostrar lo mejor de su culinaria.

Mario Vallés era un judoka consagrado, a tal punto, que representó a Colombia en diferentes torneos internacionales y hasta en la cita máxima del deporte: los Juegos Olímpicos que se llevaron a cabo en Atenas en 2004 y en Pekín en 2008.

Mario siempre fue aficionado a la cocina, pero el deporte copaba la mayor parte de su tiempo y mientras se recuperaba de una lesión en la rodilla en España, un amigo le regaló un curso de cocina, lo que impulsó más su amor, pasión y conocimiento por la gastronomía; hoy en día esta es su profesión y ese amigo es su socio.

Lo que en un comienzo se convirtió en una afición para Mario Vallés, luego se consolidó como una obsesión, así es que con la misma rapidez con la que lanzaba patadas, decidió estudiar cocina para darle rienda suelta a todo el talento que tenía escondido.

Mario Vallés dejó el judogi para ponerse un delantal de cocina y sus platos resultaron tan contundentes como los golpes y las técnicas de inmovilización que aplicaba a sus rivales en el tatami o superficie de competición.

Hecho ya un cocinero titulado, Mario Vallés se instaló en Madrid, una ciudad que siempre consideró cercana a sus afectos y en la que aprendió a desenvolverse como pez en al agua, porque su gente, su cultura y su ambiente siempre han tenido ese sazón y sabor que tanto le gusta para vivir, y para pararse frente al fogón y dejar que su creatividad y talento se eleven como el vapor del caldero.

Hortensio, Acanto y Narciso son los nombres de los restaurantes que este hombre nacido en Dagua, el tercer municipio más grande del Valle del Cauca que se precia de ser el lugar en donde nació el pan de bono y ser la cuna de la piña en el departamento, fundó en la capital española, sede internacional de la buena y exigente cocina.

Los restaurantes de Mario Vallés en Madrid cada día tienen mayor reconocimiento y se han convertido en preferidos de entendidos de la gastronomía, por su creatividad, refinamiento, y especialmente, por su sabor único.

Mario Vallés es amante del clasicismo en la cocina y le ha puesto ingredientes colombianos a ella en diversas preparaciones, rescatando la herencia que en muchos casos es difícil hallar. Por eso, este colombiano es el encargado de darle al mundo la imagen con más gusto y sabor del país.