No botes el sartén donde todo se pega: La sal es el ingrediente que resolverá este problema

Tener ollas y sartenes nuevos puede ser la compra más satisfactoria para el hogar, yen especial para aquellos amantes de la cocina y que disfrutan de tener diferentes elementos de cocina para ocupar durante una receta.

Sin embargo, durante el constante uso de estos utensilios, es posible que se pelen, se quemen o se pongan de una tonalidad negra por fuera, por su parte, los sartenes suelen perder el antiadherente y los alimentos empiezan a pegarse, generando así dificultades al momento de cocinar y retirar del sartén las preparaciones, pues estas pueden llegar a partir nuestra preparación.

Muchas personas optan por cambiar los sartenes y desecharlos; sin embargo, existe un truco para que los sartenes vuelvan a recuperar parte de su teflón y los alimentos dejen de pegarse con tanta frecuencia, con un ingrediente que todos tenemos en la cocina, se trata de la sal.

Para curar los sartenes de una manera práctica, rápida y sencilla se debe coger la paila o sartén que se quiere recuperar y ponerla en el fogón, seca sin aceite, y se le añade una buena porción de sal que cubra toda la base del sartén y esta se debe dejar hasta que la sal empiece a ponerse de una tonalidad oscura.

Con el paso de los minutos la sal empieza a ponerse marrón, pero todo depende de que tan lastimado esté el teflón del sartén, pues en algunas ocasiones puede ponerse más o menos oscura. Ahora, una vez ya hayan pasado unos minutos de curación, la sal se debe desechar en un punto donde haya agua, porque está demasiado caliente y se puede quemar la bolsa u otro recipiente donde se deposite.

Se recomienda botar en el lavaplatos mientras cae agua; de esta manera los sartenes pasan por un proceso de curación y notarás como las preparaciones empezar a dejar de pegarse. Esto se puede realizar varias veces siempre y cuando el teflón no esté lastimado, además por ende se recomienda utilizar cucharas de silicona o madera que no rallen los elementos de cocina.