Información
ingredientes
preparación
Calentar suficiente agua agregando sal. Cuando rompa hervor, añadir la pasta. Con la ayuda de una cuchara de madera o de unas pinzas revolver con cuidado para que no se pegue.
Retirar del agua cuando todavía esté un poco dura y escurrirla sobre un colador. Se debe cortar la cocción de inmediato llevándola a un recipiente con abundante agua fría. Escurrir y rociar con un poco de aceite de oliva. Reservar.
Aparte, en una olla pequeña, calentar una cucharada de aceite de oliva a fuego medio para saltear la mitad de la cebolla y del ajo finamente picados por 2 minutos.
Condimentar con sal e incorporar los mejillones.
Verter el vino blanco, tapar y cocinar hasta que los mejillones se abran.
Retirar la olla del fuego, desechar los que permanezcan cerrados, colar y conservar tanto los mejillones como el líquido de cocción.
Calentar el resto del aceite en otra sartén a fuego medio y saltear la cebolla y el ajo restantes.
Cuando estén transparentes, incorporar los mariscos, el pescado y cocinar entre 2 y 3 minutos.
Desglasar la sartén con el líquido de los mejillones para levantar los sabores que quedan adheridos al fondo, agregar el tomate pelado, sin semillas y cortado en cubos, el fondo y salpimentar.
Cocinar por 2 minutos más, agregar las hierbas y la pasta previamente marcada. Retirar del fuego.
Hacer un paquete con papel aluminio que quede herméticamente cerrado para evitar la pérdida de líquidos o vapor en el horno, ponerlo en un molde refractario y llevar al horno a 350°F (180°C) entre 5 y 6 minutos.
Retirar y servir el cartoccio en el papel.
Una vez esté en la mesa, cortar la parte superior con unas tijeras cuidando de no quemarse con el vapor.